Andrés
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14 September 2023
A veces es complicado entender la importancia de la privacidad en el mundo digital, pero puede ser un poco más fácil explicarla en el mundo de lo físico. Imagina que alguien entra a tu casa, revisa tus cosas, lee tus anotaciones privadas y se va. Eso como mínimo te hará sentir incómodo. Algo similar ocurre en el mundo digital, tus sentimientos se expresan en el contenido que consumes, tus preferencias políticas se reflejan en los “me gustas” que das, tus necesidades y situación económica queda el descubierto con las compras que haces online, tu orientación sexual queda al descubierto en las búsquedas que realizas en Google y más.
El conocimiento es poder; el conocimiento sobre ti es poder sobre ti. Tu información será usada para anticipar tus acciones y manipular la forma que compras, votas y piensas.
https://whyprivacymatters.org/translations/es/
Entonces podemos definir la privacidad como la capacidad de poner límites sobre quién tiene acceso a nuestros cuerpos, lugares y objetos. En fin, todo lo que nosotros definamos como no público de nuestras vidas. Además, también esta declarado en el artículo 12 de la Declaracon Universal de Derechos Humanos.
Ahora bien, ¿Qué significa esto en el mundo digital?. La privacidad en el mundo digital entonces podría ser definida como la capacidad de poner límites sobre tu información personal, a quién le damos acceso, qué información queremos compartir y cuál no. Y ¿Qué se considera como información personal? Por información personal entendemos lo que va desde tu nombre, tu domicilio, tu edad, tu historial de navegación y hasta tus comunicaciones por chats. Según esto, entonces podríamos definir como información personal cualquier dato que sirva para identificarte a ti como persona.
Para entender bien que se considera como datos personales podemos leer el siguiente extracto de la GDPR:
datos personales”: toda información sobre una persona física identificada o identificable (“interesado”); se considerará identificable toda persona física cuya identidad pueda determinarse, directa o indirectamente, en particular mediante un identificador, como un nombre, un número de identificación, datos de localización, un identificador en línea o uno o varios elementos específicos, característicos de la identidad física, fisiológica, genética, psíquica, económica, cultural o social de dicha persona física;
La privacidad en línea tiene la misma importancia que la privacidad fuera de internet. De la misma manera en que no deseamos que todos conozcan todo sobre nosotros, lo mismo se aplica a la información que compartimos en la red. A menudo, no somos conscientes de toda la información que proporcionamos o no le damos la importancia debida. Escribir tu correo, una contraseña y proporcionar tu número de teléfono puede parecer inofensivo. Sin embargo, esto cambia cuando toda la información que estás dejando se va relacionando entre sí y se combina con datos de diversas fuentes y mediante el uso de diferentes técnicas, como la recientemente patentada por Apple para saber que quieres a partir de tus movimientos corporales. Esto permite la creación de un perfil que puede estar vinculado a una identidad real, exponiendo mucho más sobre nuestra vida íntima de lo que pensamos. Estos perfiles pueden ser utilizados para que las grandes tecnológicas sigan generando más ganancias, para que hackers realicen actividades ilícitas y quien sabe que más.
Algunos ejemplos de esto:
Es posible que no sepan que cada vez que se obtiene algo gratis en el mundo digital, no somos el cliente sino el producto
Es inevitable que dejes rastros mientras navegas, es inevitable que tengamos que compartir datos y mayormente es una ilusión el que tenemos control sobre nuestros datos. Porque no depende tan solo de nosotros y de que leamos con atención los términos y condiciones, que tengamos precaución en la configuración de cookies o que “desconectemos” el GPS de nuestro móvil cuando no lo estamos utilizando. También depende de que los software y los servicios que utilizamos tengan la privacidad incorporada y niveles de seguridad mínimos para asegurarnos que nuestra información no será filtrada.
Siguiendo esta línea, entonces si podemos hacer algo, podemos tomar la opción de utilizar soluciones que respeten nuestra privacidad y aquí te voy a dejar algunas opciones:
Utilizar sofware libre, creado por la comunidad con la finalidad de asegurar libertades minimas a sus usuarios y no utilizarlos como producto.
Tu servicio de correo no deberia poder leer tus mensajes. Puedes utilizar servicios que giran en torno a la privacidad y completamente cifrados como ProtonMail.
Tu navegador web debe respetarte. Puedes usar Firefox.
Tu motor de busqueda no debe saber quien eres. Puedes usar DuckDuckGo o Ecosia (Interesante si es que estas preocupado por el cambio climatico)
Tus redes sociales deben ser federadas y no centralizadas. Mastodon y Pixelfed, claros ejemplos.
Y si no te dan opción entonces siempre puedes decidir no usarlo.
En conclusión, mientras los datos personales tengan un valor económico para los malos actores, nunca dejaran de inventarse formas para obtenerlos, ya sea con o sin tu consentimiento. Por eso y por la importancia que tiene la privacidad sobre otros derechos como la libre expresión y la capacidad de explorar áreas de nuestra mente sin miedo a ser juzgados o discriminados, es que es necesario que tomemos acciones para hacernos respetar.
Todos tenemos tres vidas: la pública, la privada y la secreta
Gabriel García Márquez